Hablar de lo que nos sucede es una alternativa viable de efecto reparador. Dar lugar a la palabra es habilitar la (auto)comprensión, el asumir responsabilidad, la incorporación de herramientas eficaces para lograr respuestas novedosamente diferentes
ante la adversidad.
Como dijo un gran sabio: “El dolor es inevitable, el sufrimiento es opcional”.
Podemos hablar.
Barrio de Coghlan
Ciudad Autónoma de Buenos Aires